Una película musical en español sobre un capo de la droga mexicano ha desatado una de las conversaciones más intensas del camino a los Óscar 2025. “Emilia Pérez”, dirigida por el cineasta francés Jacques Audiard y protagonizada por Karla Sofía Gascón, Zoe Saldaña y Selena Gomez, ha conquistado 13 nominaciones a los premios de la Academia, provocando tanto admiración como críticas encendidas. ¿Qué hace que esta película sea tan divisiva?
¿De qué trata Emilia Pérez?
La película narra la historia de Juan “Manitas” Del Monte, un jefe de cartel mexicano que decide someterse a una cirugía de afirmación de género para convertirse en Emilia Pérez y desaparecer de su vida criminal. Zoe Saldaña interpreta a Rita, una abogada atrapada entre su ética y el dinero, quien termina ayudando a Manitas en su transición y desaparición.

Ya como Emilia Pérez, la protagonista desea reconectar con su familia y redimirse de su pasado violento. El relato intercala drama, crítica social y números musicales, incluyendo las canciones nominadas al Óscar “El Mal” y “Mi Camino”.
El impacto crítico y cultural
La película fue bien recibida en el Festival de Cannes, ganando el Premio del Jurado y el de Mejor Actriz para su elenco femenino. Desde entonces, ha ganado Globos de Oro y obtuvo 10 nominaciones a los BAFTA.
Mientras los críticos celebran su audacia estilística y narrativa, el público general ha mostrado opiniones divididas, reflejadas en su 76% de puntuación crítica frente a un 30% de aceptación del público en Rotten Tomatoes.
Controversias sobre la representación trans
La interpretación de una mujer trans por una actriz trans, Karla Sofía Gascón, ha sido vista por muchos como un avance. Emilia no es cuestionada por su identidad; su transición no es el foco del drama, sino una etapa más de su vida.

Organizaciones como GLAAD han criticado la narrativa por perpetuar estereotipos: presentar la transición como una forma de escapar de la justicia, mostrar a la familia como víctimas ignoradas y recurrir a clichés sobre la maldad inherente de las personas trans. Críticos como Fran Tirado afirman que la historia refleja una mirada cisgénero sobre la experiencia trans.
Gascón defendió su papel afirmando que el personaje es complejo y se construyó con sensibilidad. Respondió a las críticas con contundencia, cuestionando la autoridad moral de algunos críticos desde redes sociales.
Acusaciones de representación cultural inadecuada
La producción fue criticada por no contar con suficiente participación mexicana, lo que llevó a errores culturales y representaciones cuestionables. El director Audiard admitió no haber hecho investigaciones profundas, lo que alimentó la percepción de apropiación cultural.
Adriana Paz, actriz mexicana en la película, declaró no sentirse ofendida por la representación y pidió mayor reflexión antes de emitir juicios categóricos. Audiard, por su parte, ofreció disculpas en una rueda de prensa.
Reacción a los tuits pasados de Gascón
En enero, resurgieron tuits antiguos de Gascón con declaraciones ofensivas hacia musulmanes, George Floyd y la diversidad en el cine. Aunque muchos fueron eliminados, las capturas circularon ampliamente.

Gascón se disculpó a través de Variety, afirmando que entiende el dolor causado y que su intención siempre ha sido luchar por un mundo mejor. Posteriormente culpó a un ambiente tóxico en redes, y a rivales que buscaban desacreditarla.
¿Cuáles son las posibilidades en los Óscar?
Con 13 nominaciones, incluyendo Mejor Película, Dirección, Actriz, Actriz de Reparto, Canción Original, y Maquillaje y Peluquería, Emilia Pérez podría triunfar especialmente en categorías técnicas e internacionales.
Aunque Zoe Saldaña ganó el Globo de Oro, se enfrenta a fuertes contendientes como Ariana Grande y Felicity Jones. La categoría de Mejor Canción también está reñida, aunque tener dos nominaciones puede aumentar sus probabilidades.
Una película que no deja indiferente
“Emilia Pérez” no es una película convencional. Mezcla musical, crítica social y un enfoque estilístico único para contar una historia que incomoda, emociona y provoca reflexión. Su presencia en los Óscar 2025 representa una conversación cultural necesaria: sobre identidad, redención, y la forma en que el cine representa historias que trascienden fronteras.